En White Hart Lane se disputó el partido en honor a Ledley King entre los jugadores del Tottenham y los amigos de King.
El árbitro del juego fue Howard Webb, un árbitro que normalmente es serio y que no llama la atención. A pesar de esto, decidió unirse a la diversión y conducir el el balón que le dio Lewis Holtby.
Pero antes de que Webb tuviera alguna oportunidad de pasar, el centrocampista alemán le persiguió para barrerle por detrás. El árbitro procedió, como broma, a seguirlo y empujarlo, imitando el drama “Suarezco”, hasta que Holtby cayó al suelo.
(foxdeportes)